Tercera y última película del pintor y director Donald Cammell, que tomando elementos del giallo sacudía a la población de una pudiente comunidad norteamericana en este film cargado de paranoia y sadismo, algo que la ha convertido en una de las películas de terror favoritas de Guillermo del Toro. En una pequeña población se están cometiendo terribles asesinatos a mujeres de buena posicion social. Varios detectives se trasladan al lugar para investigar quién puede ser el asesino. Según las pistas, todo apunta al marido de Joan, llamado Paul, que según ella, es un marido ejemplar. A partir de entonces, empezará para Joan un laberinto de sospechas y paranoías por la inseguridad de si de verdad el hombre quien ella creía que era un marido ejemplar es en realidad un macabro psicópata.