Franco Nero se pone en la piel de un periodista en problemas en este sofisticado giallo en el que ya sobresalía la magnífica dirección de fotografía de Vittorio Storaro.
Un alcohólico periodista comienza a investigar una serie de crímenes que ocurren en la gran ciudad, todos ellos conectados con él, ya que la mayoría eran personas conocidas, pero sobre todo porque es el principal sospechoso para la policía.