Perspicaz comedia surrealista y fantástica con toques vintage que, en ocasiones, se siente como si David Lynch y Wes Anderson hubiesen tenido un bebé. Una crónica del desamor en clave interdimensional premiada en el gran festival del cine indie SXSW que gira en torno a las luces y las sombras del éxito comercial de un juguete.
Cuando una tragedia inesperada afecta a un inventor amateur de juegos, su esposa y un rival hacen un pacto para compartir el botín de su invento. Pero cuando ese invento se convierte en una sensación internacional, la pareja traza diferentes cursos en sus propias vidas, hasta que el deseo los reúne nuevamente para una última partida.