Partiendo de una sólida base, que se cimenta en la mejor tradición del cine negro, Malle propuso una mirada desencantada sobre los mitos del género que le valió todo un León de Oro en el Festival de Venecia. Un espléndido Burt Lancaster encarna al emblemático personaje alrededor del cual se desarrolla una reflexión tan lúcida como nostálgica sobre la futilidad de la existencia. La coherencia entre el discurso y la formulación visual es absoluta.Lou es un viejo jugador que intenta ganar algo de dinero alrededor de los casinos. Para ello recurre a los ahorros de Grace, su amante, con quien vive una joven llamada Sally, de la que Lou no tarda en enamorarse. Sally es una canadiense que de día trabaja vendiendo ostras y de noche recibe clases de croupier, soñando con llegar a ser algún día la primera mujer que trabaje en el Casino de Montecarlo. Está casada con un traficante de drogas llamado Dave, que huye con una partida de drogas, mientras la Mafia intenta averiguar su paradero a través de Sally.