Unos mil pasajeros quedan atrapados en un tren infectado por un virus mortal. Huyendo de la polícia, el terrorista que transporta el virus se embarcó en el tren, exponiendo a todos a esta terrible plaga. El coronel Mackenzie (Burt Lancaster), el médico Jonathan Chamberlain (Richard Harris) y su mujer (Sophia Loren) estarán al mando de la situación y procurarán detener al terrorista. Tras el fracaso de la operación, Mackenzie intentará recoduncir el tren en dirección al puente de Cassandr donde este debería desaparecer para siempre.