La última película como protagonista de Carlos Álvarez-Novoa. Un emotivo relato sobre la España vacía.
El último habitante de un pueblo convive con sus recuerdos y sus muertos justo en el momento en que un extraño violinista acude para llevarle hasta la tumba. En tanto los momentos más importantes de este lugar, que morirá junto a su protagonista, van tomando vida en una historia de amores, ajusticiamientos y secretos que nunca llegarán a ver la luz. Amarga comedia sobre la despoblación rural y sus consecuencias para una sociedad que está olvidando su esencia.