"Last Summer" es una película muy especial, una obra maestra, delicada y sutil, del debutante Mark Thiedeman. A través de una narración poética y luminosa, y con una manera de mostrar la naturaleza que nos recuerda al cine de Terrence Malick, Thiedeman nos cuenta la sencilla relación de amor entre dos adolescentes, Luke y Jonah, que comparten los últimos días del verano contemplando su incierto futuro. Los campos de béisbol, las bicicletas, el cielo azul, la iglesia, un entorno conservador y tradicional que no empaña la naturalidad con la que ellos viven y la manera de contarnos su relación. De una belleza contundente que se queda en la retina y el corazón durante mucho tiempo, "Last Summer" consigue sin ningún artificio llegar al centro de lo que es el cine, la emoción en imágenes.