Los ochenta fueron los años de los monos diabólicos, y es que dos años antes de George A. Romero dirigiera "Atracción Fatal", Richard Franklin firmaba este inquitante thriller protagonizado por Elisabeth Sue y un siniestro primate.
El excéntrico zoólogo Dr. Phillip (Terence Stamp) contrata a la estudiante Jane (Elisabeth Shue) como ayudante en su mansión, aislada al borde de un acantilado. El doctor vive con tres chimpancés con los que realiza un estudio sobre la inteligencia de los primates. Cuando Jane se traslada al caserón comienzan a suceder cosas extrañas. Los monos se comportan de un modo siniestro, especialmente uno llamado Link.