Tras una década comprometido con un cine mucho más político y experimental, Jean-Luc Godard retomaba la narrativa tradicional para retratar a tres personajes diferentes con una visión única de las relaciones sexuales. Denise Rimbaud (Nathalie Baye) es una editora no conforme con su trabajo que decide abandonar a su amante, Paul Godard (Jaques Dutronc), e irse a vivir al campo. Paul no quiere dejar la ciudad pero no puede vivir sin Denise. Y, el tercer personaje, Isabelle (Isabelle Huppert) es una prostituta que sobrevive como puede en la ciudad.