Un pederasta confiesa a cámara sus actos y se arrodilla para pedir perdón a sus víctimas. Es una de las imágenes más potentes de este estremecedor documental sobre Joaquín Benítez, que abusó de una veintena de alumnos del colegio de los Maristas de Sants-Les Corts en Barcelona.Manuel Barbero, padre de una víctima de abuso sexual, y Joaquín Benítez, el pederasta que abusó de su hijo y de veinte niños más, son los personajes principales de este documental. El director de la película aborda las figuras clave de esta historia con un trabajo de investigación periodística. Por primera vez, un pederasta habla y confiesa a cara descubierta en un documental.